Aunque seamos una inmobiliaria y nos dediquemos a la compra y venta de inmuebles, nuestra labor, la gran mayoría de las veces no acaba aquí, y es por este motivo por el cual hoy dedicaremos esta publicación a un increíble trabajo realizado por nuestra agente inmobiliaria Rosalía Sans.
La propietaria del inmueble es una persona de avanzada edad, concretamente nacida en 1913 y actualmente se encuentra en una residencia.
Los hijos de la propietaria ponen a la venta dicha propiedad con todos los papeles necesarios en regla (poderes, tutoría, etc.), al menos eso parece en un primer momento.
Se hacen arras del piso para su reserva, descubrimos e informamos a los vendedores que no se realizó ningún trámite en el momento del fallecimiento del padre, la aceptación de la herencia, la cual es imprescindible para poder realizar la venta de la propiedad.
A partir de este momento, empieza una exhaustiva recogida de información e investigación por parte de Rosalía, ya que algunos hermanos de los apoderados también están fallecidos sin trámites realizados post-fallecimiento y algunos de los lazos familiares, con los años han ido desapareciendo, además de cambios de domicilio en otras comunidades.
Rosalía consigue (no sin gran esfuerzo), todos y cada uno de los documentos necesarios (certificados de nacimiento y de defunción, libros de familia y otros) para poder realizar la operación correctamente, moviéndose por juzgados, registros civiles, tanatorios y listines telefónicos entre otros.
Una perfecta y pulcra labor que no todas las empresas inmobiliarias aceptarían realizar.
Eso es lo que ofrecemos, seriedad y profesionalidad con un equipo de agentes insuperables.
La propietaria del inmueble es una persona de avanzada edad, concretamente nacida en 1913 y actualmente se encuentra en una residencia.
Los hijos de la propietaria ponen a la venta dicha propiedad con todos los papeles necesarios en regla (poderes, tutoría, etc.), al menos eso parece en un primer momento.
Se hacen arras del piso para su reserva, descubrimos e informamos a los vendedores que no se realizó ningún trámite en el momento del fallecimiento del padre, la aceptación de la herencia, la cual es imprescindible para poder realizar la venta de la propiedad.
A partir de este momento, empieza una exhaustiva recogida de información e investigación por parte de Rosalía, ya que algunos hermanos de los apoderados también están fallecidos sin trámites realizados post-fallecimiento y algunos de los lazos familiares, con los años han ido desapareciendo, además de cambios de domicilio en otras comunidades.
Rosalía consigue (no sin gran esfuerzo), todos y cada uno de los documentos necesarios (certificados de nacimiento y de defunción, libros de familia y otros) para poder realizar la operación correctamente, moviéndose por juzgados, registros civiles, tanatorios y listines telefónicos entre otros.
Una perfecta y pulcra labor que no todas las empresas inmobiliarias aceptarían realizar.
Eso es lo que ofrecemos, seriedad y profesionalidad con un equipo de agentes insuperables.
No hay comentarios:
Publicar un comentario